Ya podemos tener nuestras conversaciones, sobre los temas que tu quieres, pero las tenemos.
Principalmente sobre tus juguetes o los vídeos que pones en la tableta con el Youtube, intentando convencerme por qué debemos dejar puesto el que tú has querido y no el que yo puse.
Estás en otra etapa de cabreos y cabezonería, más allá de lo habitual, y ahora, cuando te dicen que no, te sientas en el suelo y pones cara de cordero degollado.
Eres charlatán, te gusta explicar cosas, y ya empiezas a hacer tus películas con los juguetes.
Haces bromas, que decir mal los nombres de los personajes de los cuentos intencionadamente para reírnos, cuando estamos en tu cama terminando el día.
Saludas a la gente. Usas de manera desordenada el gracias y el por favor.
Hemos pasado unos días fuera, conociendo a tu nuevo primo, viendo peces, focas y tiburones y pisando arena de playa mientras buscábamos conchas.
Y lo que está por venir.
Este año va a ser fantástico.
Papá.
